La tranquilidad de Río de Oro, un pequeño municipio del sur del Cesar en la región de Catatumbo, se vio sacudida la mañana de este jueves por un ataque armado contra la estación de Policía.En este lugar, ubicado a 15 minutos del casco urbano de Ocaña (Norte de Santander), se presentó un hostigamiento de grupos armados que dejó dos uniformados muertos tras quedar gravemente heridos en medio del fuego cruzado.Las autoridades informaron que los policías alcanzados por los disparos fueron auxiliados de inmediato por sus compañeros y trasladados de urgencia al Hospital Regional Emiro Quintero Cañizares, en Ocaña. Sin embargo, los esfuerzos médicos no lograron salvarles la vida.Las víctimas fueron identificadas como el patrullero José Daniel Pedraza González y el subintendente Henry Ospina Lasso.Patrulleros asesinados en Cesar. Foto:Policía.Cinco meses de emergencia en el CatatumboDesde enero de este año, el Catatumbo ha registrado la peor crisis humanitaria de las últimas décadas en Colombia. El choque entre las disidencias del frente 33 de las extintas Farc y el Eln ha dejado, hasta finales de mayo de este año, más de 100 muertes confirmadas, alrededor de 65.000 desplazados internos y cerca de 23.000 personas confinadas en sus veredas por amenazas y enfrentamientos armados. Estas cifras oficiales y reportes humanitarios reflejan un incremento sostenido de la violencia en la región.Ambos grupos mantienen un control territorial significativo. Las disidencias buscan consolidar rutas de narcotráfico hacia Venezuela, mientras que el Eln intenta preservar su influencia política y financiera mediante extorsiones y alianzas con redes criminales locales.Desplazados en Catatumbo. Foto:César Melgarejo/ El Tiempo @cesarmelgarejoaEl Ejército y la Policía, desplegados con más de 10.000 efectivos, han impulsado operativos que, si bien han neutralizado explosivos e incautado armas, no han logrado desarticular de manera integral a las estructuras armadas ilegales ni prevenir los desplazamientos masivos.El desplazamiento forzado se ha convertido en una pieza clave del conflicto. Familias enteras abandonan sus viviendas en busca de seguridad en Cúcuta, Ocaña o San Calixto, donde sobreviven en albergues improvisados y con ayudas escasas. La Alcaldía de Cúcuta reportó que, en los primeros meses de la crisis, diariamente llegaban entre 3.000 y 5.000 personas, cifra que, aunque ha disminuido, mantiene niveles sin precedentes en la región.Desplazados en Catatumbo. Foto:César Melgarejo/ El Tiempo @cesarmelgarejoaAdemás, el acceso a servicios básicos ha tenido en vilo a miles de personas debido al confinamiento. Según un informe de la ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados), solo en Catatumbo, 91.000 personas hasta el día de hoy, han sufrido los efectos de esta crisis; 64,000 han sido desplazadas y 27.000 han quedado confinadas. Esto les impide poder acceder libremente a servicios, alimentos o atención médica.Redacción JusticiaMás noticias:

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