Hosbec: El turismo de Valencia se resiente de los efectos del cambio climático | Noticias de la Comunidad Valenciana

Todos los indicadores turísticos de ocupación hotelera en la Comunidad Valenciana durante este primer trimestre del año repiten o mejoran los datos de 2024, según un informe elaborado por la patronal hotelera Hosbec. Solo hay una excepción: “Tanto la provincia como la ciudad de València no terminan de consolidar la recuperación tras la dana, con un importante volumen de cancelaciones por la mala meteorología sufrida durante esta primera quincena de marzo”, señalan. Tanto el brutal temporal que asoló Valencia en octubre como las persistentes precipitaciones que se están produciendo estos días de Fallas son consecuencia del calentamiento del Mediterráneo debido al cambio climático, certifican fuentes de Aemet.Los datos que maneja Hosbec no dejan dudas. “La ciudad de València se deja casi 10 puntos de ocupación hotelera” en estos inicios de año, una caída “especialmente llamativa” en el segmento “de los hoteles de cuatro estrellas”. La patronal turística incide en que “una pérdida de más del 23% en mercados tan importantes como el alemán o el estadounidense” es la clave de estos malos resultados. El panorama que pinta el informe dice que la ocupación en la provincia de Valencia en la primera quincena de este mes alcanza el 74,8%, cuando el año pasado se situó en el 81,1%.La previsión para lo que queda de marzo es aún peor, ya que del 75,6% de 2024 se ha pasado al 66,9%, tal como marcan las reservas solicitadas. En la ciudad, el descenso de turistas es aún mayor. Durante los quince primeros días de marzo se pasó de un 82% de ocupación al 73% este año, mientras que en la segunda quincena, los hoteles se dejarán 14 puntos de ocupación, del 78% al 64%, según las estimaciones de Hosbec. Los hoteleros tratan de amortiguar el golpe. “Este año, las reservas para el periodo completo de Fallas, con una previsión del 70% para el periodo completo, están mostrando un comportamiento ligeramente diferente”, asegura el estudio, “probablemente condicionado por la previsión de lluvias para los últimos días y el hecho de que la cremà cae entre semana, lo que podría estar afectando a la llegada de visitantes de última hora”. El año pasado, el último día de las fiestas valencianas también cayó en día laborable, martes.La incidencia del cambio climático en este comportamiento turístico es ineludible. En su cuenta de la red social X, la Aemet señaló que los 11,6 grados alcanzados ayer en Valencia marcan “la temperatura diurna más baja” en plenas fiestas “desde el 18 de marzo de 1989″, cuando el mercurio se detuvo en 10,2 grados. También alertaron de que la jornada de hoy podría ser “el día de Fallas con más precipitación desde que tenemos registros en Valencia”. Desde 1938, apuntaba la agencia meteorológica, los mayores registros pluviométricos son los de 19 de marzo de 200 (30,8 litros por metro cuadrado), 18 de marzo de 2021 (22,4) y 16 de marzo de 2022 (23,8). “En la última década”, declara José Ángel Núñez, jefe de Climatología de Aemet en la Comunidad Valenciana, “hemos detectado un incremento de lluvias en los meses de marzo”. El primero con valores anómalos fue el de 2015 y “el patrón de lluvias muy por encima de máximos históricos se ha repetido en 2020, 2022 y 2025″.“Este salto en la serie”, continúa Núñez, “puede estar relacionado con el extra de energía derivado de un mar más cálido”. A pesar de que el Mediterráneo sigue frío en invierno, está uno o dos grados por encima de lo habitual, lo que “puede ser suficiente para que estos temporales de finales de invierno dejen más lluvia acumulada”. No se puede comparar con el otoño, estación en la que las lluvias jarrean con mayor intensidad, pero sí que se prolongan muchos días, los temporales de esta época son muy “persistentes”.Los datos de Hosbec reflejan que el turismo se resiente del clima en la castigada provincia de Valencia. Se frustran de esta forma, en cierta medida, los planes del presidente de la Generalitat, Carlos Mazón, quien en enero, al presentar la programación autonómica en Fitur, manifestó que “este año, los valencianos necesitamos más que nunca a nuestra primera industria”, en referencia al turismo, con el fin de que pueda “ayudar a los sectores afectados” y así “acelerar la reconstrucción” del territorio asolado por la dana. La industria, no obstante, puede verse damnificada después de que el jefe del Consell haya pactado con Vox la supresión de partidas destinadas a la lucha contra el cambio climático, para sacar adelante los presupuestos autonómicos de 2025. “Es inaceptable que se sacrifiquen los intereses de nuestros productores”, espeto, en referencia a agricultores, ganaderos y pescadores, “en aras de una agenda ambientalista en Europa mal concebida”.En este contexto, el motor económico turístico dependerá del resto de áreas de la Comunidad Valenciana, que sí mantiene los resultados del año pasado, en general. El informe de Hosbec apunta que “con el 92% de la oferta turística abierta”, “la provincia de Alicante es la que mejor comportamiento ha registrado, con los hoteles al 84,2% en el sur de Alicante, el 77,2% en Benidorm y el 76,3% en la Costa Blanca en su conjunto”. La provincia de Castellón calca prácticamente los resultados del ejercicio anterior, con “casi un 74% de media esta primera quincena” de marzo. Las previsiones para las fiestas de la Magdalena estiman “puntas de ocupación del 80% en estos momentos”, tanto para la provincia como para